Volando por Aerolíneas Argentinas a Miami en Club Condor (crónica de vuelo)

Este relato arrancó con otro post en su momento, donde hablé del retraso anunciado y las causas que lo provocaron. También sobre el comportamiento de una parte del pasaje.

Vamos ahora a lo agradable del relato.

Como me anunciaron que el vuelo saldría a las 3 y algo de la madrugada, caí a la medianoche a Ezeiza. No había nadie. Fui al mostrador de Aerolíneas y despaché el equipaje.

Mis informantes del aeropuerto, me habían dicho que volaría en el LV-BMT que es un Airbus 340 versión 300. Es el más viejo de la flota con casi 20 años. Finalmente fue ese el que se quedó abajo y no salió.

Agradezco a Sebastián y Fernando, lectores de este blog y empleados de Aerolíneas por la onda de siempre y porque además esta vez me pudieron asignar el asiento antes de mi llegada al aeropuerto. Como siempre no pongo los apellidos por las dudas… pero siempre cruzamos mensajes en twitter.  Me pudieron dar el 5H en mi debut en Club Condor.

Como saben los lectores regulares del blog, usé el canje que me dió la cateogría Platino conseguida por la Amex Ar Plus hace un tiempo. Si mal no recuerdo en abril compré el pasaje y de inmediato hice el pedido de upgrade, el cual fue confirmado en menos de 24hs para los dos tramos.

O sea pagué un pasaje común… y fui en el business de Aerolíneas. Negoción.

Despaché mi valija, fui a migraciones donde podría haber tenido la ventaja de Sky priority, pero como no había nadie… daba lo mismo.

No declaré nada esta vez en aduana, porque me llevé declaraciones anteriores.

Me fuí directo al VIP, donde había algunos dormilones, estimo por las demoras de los vuelos de esos días.

El VIP de Aerolíneas ya lo publiqué está muy bien, es mucho mejor que el de American Express actual obviamente.

Se puede ingresar siendo Platino u Oro o viajando en Club Condor. También lo pueden usar los otros socios Skyteam con niveles altos volando en alguna de las aerolíneas de la alianza.

Hay varios wifi en el salón. No andan uauuu, pero andan.

Bueno, hagamos un salto de varias horas donde sucedieron los otros hechos.

El avión que nos asignaron fue un Airbus 340 pero el versión 200. El LV-ZPX que tiene casi 19 años. El serie 200 es el que se usa habitualmente para los vuelos a Sydney y a Roma, y es de los que serían reemplazados por la serie 500. El 200 tira unos 1.000 kilómetros más que el 300 y es por eso que está asignado a las rutas más largas.

Que el 200 fuese a Miami a priori era una señal de que la flota estaba ajustándose por todos lados para cubrir los vuelos.

Lo que hicieron bien ahí operativamente, es que no nos tuvieron que cambiar los boarding pass, porque el avión en si era el del vuelo de la mañana a Miami, entonces le cambiaron el número y salió con el número de anoche. Así todos los que teníamos el boarding pass, o mejor dicho la mayoría ya teníamos nuestros asientos.

Tuvieron que pedir que algunos pasajeros fueran en otros vuelos y se de algunos que fueron endosados a United o Delta por ejemplo.

En el momento de hacer este reporte la flota ya está ok, y no hay estos retrasos.

A los bifes!

Ahí entré entonces entre los primeros al avión. Pero era todo un caos con la presencia de la policía aeronaútica en la puerta de la manga, por si había disturbios. Exaltados quedaban algunos. Yo quería dormirrrrrr

En esta serie 200 se ven butacones de abuela casi 😉

Son cómodos realmente y anchos.

Tiene comandos para que se mueva y recline, y si dan el aspecto de viejos

Desde mi butaca, adelante de todo, se veía en Boeing 777 de British

Al toque de sentado pasó una azafata con copitas de jugo y creo que era agua o champagne (estaba dormido…)

No me daba mucho el cerebro para las fotos ya. Realmente estaba quemado.

Salió el avión, fuimos rápido a cabecera y despegamos.

Estimo que a los 3 minutos ya había gente durmiendo. De paso se ve la mantita que dan que está muy buena

Pregunté como sería el servicio, porque yo estimaba que pasarían directo al almuerzo… y no, me avisaron que primero vendría el desayuno.

Y así fue!

Uno podía elegir medialuna o un pan, en ambos casos calentitos. Un café o te. Había una compotera con fruta fresca que incluía kiwi, naranja, manzana, ananá y algo más. Daban cereales y preguntaban con que lo quería acompañar si con leche o yogurt. Pedí el yogurt.

Los cubiertos de metal.

Ahí fue que al toque pasó uno de los «azafatos» con otro carrito y ofrecía algo caliente para adosar al desayuno. Podía ser un tostado o un omelette…

Tenía que probar el omelette…

Confieso que estaba excelente. No se como hacen para tenerlo así, porque obvio no se hace en el avión. Tanto este como el de LAN son geniales. Junto al omelette había un pedazo de tomate y un champignon.

Quiero destacar a la azafata que era como la principal de mi pasillo al menos y la que siempre pasaba o con el jugo, o también pasó con las toallitas calientes. Tenía una presencia…

Y vamos de nuevo con esta aclaración que una vez hice y se enojaron algunos porque no puse foto. Me refiero a su profesionalidad. Dejo de lado que era una competidora de Miss Argentina (y no de tapa de Hombres para que se entienda la diferencia) Una «morocha argentina» hecha y derecha. Muy profesional, muy agradable, muy prolija y servicial.

Verán con el reporte del regreso que no fue tan así en dicho vuelo, y eso es lo que tiene Aerolíneas. Personal brillante que deja en offside a algunos dinosaurios remanentes… pocos, pero quedan algunos. La tripulación de este vuelo de ida era brillante.

No quería dormir mucho, porque como llegaría a la tarde eso me complicaría la noche. Pero no daba más y algo cedí.

Me desperté y tomé algunas fotos

Le había preguntado a la azafata en cuestión, si podía pasar a la cabina a tomar una foto cuando estuviésemos ya en crucero. Eso lo hice durante el desayuno. Me dijo que lo consultaría.

Como cuando me desperté no la vi, y justo pasó uno de los «azafatos» y seguro después de este reporte me dirán como debo llamarlos, le volví a consultar lo mismo. Le dije que en otras ocasiones había pasado y que hacía un blog de viajes.

De hecho le di mi tarjeta (si si, tengo una que dice Sir Chandler y todo) para que la entregara o mostrara al comandante llegado el caso!

Y me autorizaron!!!

Es una suite la cabina al lado del 737 de  la otra vez.

La verdad el brillo es muy molesto y los pilotos están con anteojos todo el tiempo. Los saludé, cruzamos dos palabras y el comandante me dijo que tome las fotos porque estábamos cerca de una zona de turbulencia. Y era verdad… adelante había unas nubes heavys.

Disparé varias fotos como la de arriba para mi archivo y cuando llegué instagramee esta

Me retiré victorioso. No fue así al regreso…

Al rato pasaron a dejar el menú del almuerzo

La entrada era común a todos y así estaba presentada. Amo el jamón crudo y realmente estaba muy bueno, junto al queso parmesano y al brie. Botellita de aceite de oliva, manteca y ofrecían pan negro o blanco

Elegí el solomillo de cerdo en reducción de cerveza, miel y romero. El platito no se ve muy atractivo en la foto o por como lo entregan, pero estaba realmente muy bueno. Un manjar.

Al terminar pasaban nuevamente con la bandeja de postres y uno podía elegir entre selección de quesos o helado de Chungo

Y fui por el helado con salsa de chocolate

Siempre pasaban ofreciendo vino (creo que eran 3) y demás bebidas.

Todo muy rico.

Me olvidé de comentar sobre el entretenimiento a bordo… están las pantallas personales, pero no encontré nada. No pasaban nada. Creo que estaba el GPS pero no valía la pena. Estaba con el iPad

Y así fue que en el mapa me decía que estábamos cerca.. y esperé para una foto así

Fue muy tranquila la aproximación y con «inicial básica y final», las 3 etapas de un aterrizaje de manual de curso de piloto 😉

En básica pude fotografiar la pista donde aterrizaríamos

Fue un aterrizaje muy suave y se escucharon los aplausos.

Digo se escucharon, porque en Club Condor no aplaudieron.

Pero atrás se sentía además que se alentaban y gritaban. Estaban eufóricos.

Pude salir rápido, porque dejaban salir primero a los de Club Condor, fui rápido por el pasillo de la terminal J hasta migraciones y no había nadie!!

A los 2 minutos pasé al oficial de migraciones, dos preguntas y entré.

Fui a buscar el equipaje que también apareció al toque, y me fui para la aduana.

Esta vez no daban las opciones de ir por un lado directo a la calle o pasar por revisión… todos ibamos a pasar las valijas por las máquinas.

Pero nada más!

Las pasé y listo.

Y me fui a buscar el auto. Realmente salí muy rápido. Quemado, pero bien alimentado 🙂

Lo mejor del vuelo sin lugar a dudas fue la comida, y pese a que el avión es de los viejitos, fue muy cómodo estar en el mismo por la distancia y el ancho.

En breve el viaje de regreso, ya en un mejor avión… y ni hablar de la butaca!