Vuelo a Salta (regreso)

La fundamental diferencia con el viaje de IDA es que este fue super puntual. Quedó registrado en la aplicación que uso. Incluso dice que el vuelo salió dos minutos antes de lo planeado.

El relato de la ida está en este post http://www.sirchandler.com.ar/2012/08/volando-salta-por-lan/

Después de salir del hotel en Salta, pasamos a visitar a un amigo que vive en esa linda ciudad y luego nos dirigimos al aeropuerto, donde primero tendría que devolver el auto alquilado por esos días.

El día anterior había sacado una foto desde la cima del cerro que te lleva al teleférico con el teleobjetivo a full apuntando a la pista. Lástima que no agarré ningún vuelo 😉

No llegamos con mucho tiempo y fuimos directo a hacer el checkin. En realidad a despachar las valijas porque ya habíamos hecho el web checkin. La empleada de Lan era muy amable y simpática por lo que aproveche para consultarle cuanta gente hacia web checkin. Me dijo que por lo general mas de la mitad del avión lo está haciendo. Que eso va facilitando su trabajo.

Por la beba viajamos con el «huevito» y el cochecito, pero en el viaje de ida fuimos con los dos hasta la puerta de embarque, porque si alguno de los dos lo despachábamos con la lluvia que había todo hubiese llegado hecho sopa.

Como el clima era bueno en Salta el huevito si lo despachamos esta vez. La empleada de Lan igual le puso un nylon protector. El cochecito nos acompaño hasta la puerta de embarque.

Nos fuimos al primer piso y como faltaba un poco paramos en la confitería.

El aeropuerto de Salta es mucho mejor que el de Mendoza por ejemplo, que estimo tiene un trafico similar. Es mas amplio o al menos da esa sensación.

En la confitería nos despedimos de las empanadas salteñas… Son lo mas! Es gracioso pero en ese mismo nivel hay un local que las vende congeladas para llevar a destino… Igual esta vez estaba cerrado.

En la manga estaba un 737 de Aerolineas Argentinas que estaban anunciando de salida inmediata. Justo aterrizó nuestro vuelo de Lan cuando estaba yéndose el de AR. Era una «manga caliente»!! Porque fueron a lo sumo 3 minutos sin avión en la misma…

Procedimos a embarcar, dejando pasar a muchos. No teníamos apuro, por mas que por estar con un bebé podíamos embarcar primero. Como siempre filas del «dofon» para nosotros… es una costumbre que una vez expliqué.

Era el Airbus 320 LV-BHU. También en muy buen estado, pero no tenía el retapizado del que nos había llevado a Salta. Voló por primera vez en junio del 2001 para Lan Chile y desde marzo del 2007 está en Lan Argentina. 11,2 años reporta Airfleet.

Siempre se arma la fila en la puerta, por eso ya si no ingreso primero… prefiero hacerlo último, aunque está el riesgo del lugar en el equipaje. Eso me puede perjudicar cuando viajo solo, pero al ser los 4 ocupando 3 asientos, la lógica indica que esa parte de arriba es nuestra… o terminará siéndolo 😛

El día estaba bien para volar y cuando salimos vi a 3 MD de Andes. No se si ya están «abandonados» o de recorrida. Una pena que no se pueda desarrollar otra aerolínea argentina.

Despegamos rápidamente y se movió un poco. El cielo seguía estando «lindo»

El vuelo estaba casi lleno, si es que no lo estaba totalmente.

No hay mucho más para destacar. Repartieron las «cajitas infelices», que es la forma cariñosa de llamarlas, porque algunos se quejaron en el post anterior por esto. No es feliz porque no trae juguete 😛

Acá un video del aterrizaje, donde se ve que estaba Buenos Aires todo «tapado». Estimo que eso puso nervioso a algunos y por eso ni bien tocan aplauden muchos (???) No entiendo mucho el tema de los aplausos, porque a veces se logran y otras no.

Ni bien aterrizamos vi a dos de los helicópteros presidenciales y uno estaba con las hélices en movimiento.

Supuse que quizás era señal de que volvería a ver al Tango 01 en acción… y cuando el avión dobló lo confirmé que estaba en camino porque vi a estos muchachos alistados. Saqué la foto rápido por eso está algo movida.

Finalmente no lo vi llegar.

Salimos rápido del avión, donde nuevamente nos tocó fuera de manga, y en este caso la ventaja es que pudimos salir por atrás.

Hicimos 20 metros… y llegamos con el colectivo a la zona de equipaje, el cual llevaron rápido.

Esperamos el remis que llamé antes de despegar, para evitar a la mafia de los taxis y pronto llegamos a casa.

Subí en el camino de regreso la foto que comparaba como me fui de Salta y como llegué a Buenos Aires… y era una síntesis de la «alegría» de volver a esta ciudad… 😛

Un placer poder volver a Salta, a la cual había solo una vez y por un solo día. La familia volvió encantada y esperan que en algún momento podamos ir nuevamente pero con más días y tiempo.

Quizás quede para el proyecto de la Ruta 40 enterita… que tarde o temprano haré. Pero eso es para otro post!